miércoles, 9 de enero de 2008

El Fotógrafo de la Naturaleza


Daniel Beltrá es un fotógrafo español de 42 años que actualmente reside en Seattle, Estados Unidos. Estudió biología, pero su pasión por la fotografía hizo que dejara la carrera a medias, ya que su trabajo para la agencia EFE en Madrid le obligaba a viajar a menudo. Tras cuatro años aceptó un empleo como corresponsal español de la agencia francesa Gamma. Allí permaneció diez años, cubriendo reportajes y noticias alrededor del mundo. Actualmente, su trabajo es distribuido por la agencia Zuma Press.
En 1990 comenzó su colaboración con Greenpeace, convirtiéndose en uno de sus más importantes fotógrafos. Ha documentado varias expediciones al Amazonas, el Ártico, los océanos del sur y los glaciares de la Patagonia, entre muchas otras. De este modo ha conseguido unir sus dos pasiones –naturaleza y fotografía-. Además, su trabajo ha aparecido en publicaciones como National Geographic, Time, Business Week, Der Spiegel, Geo, Paris Match, Stern, The Newsweek, etc.





En 2006 Beltrá fue galardonado con el tercer premio del World Press Photo en la categoría de Series de la Naturaleza y también recibió el Premio de Oro en el China International Press Photo Contest en la categoría de Naturaleza y Medio Ambiente, por su trabajo sobre la sequía del Amazonas.




En 2007 fue ganó el segundo premio del World Press Photo en la misma categoría por su trabajo sobre la deforestación y las plantaciones de soja del Amazonas.


La importancia del trabajo de este hombre en lo que al Medio Ambiente se refiere es notable. Este es un tema que me interesa especialmente y por eso he decidido hacer mi redacción sobre él. Creo que sus fotografías no sólo son perfectas desde el punto de vista estético y compositivo, sino que además transmiten mucho.
Un oso polar saltando de un témpano a otro no es simplemente un animal bonito, también representa el problema del calentamiento global y el deshielo. No hace falta ninguna explicación para comprender cómo este asunto está afectando a todos los seres vivos del planeta. Basta con ver esa fotografía para ser conscientes de que las consecuencias de nuestro paso por el mundo están empezando a aflorar, que la supervivencia de muchas especies (incluido el hombre) se está empezando a ver amenazada.
Lo mismo pasa con el resto de sus fotografías. La imagen del barco encallado en las arenas amazónicas es bastante conmovedora. Y resulta que esa sequía, al igual que el deshielo y la deforestación que Beltrá ha registrado con su cámara, son responsabilidad directa del ser humano. Es una costumbre generalizada dar la espalda a estos temas, ya que la mayor parte de la gente no quiere preocuparse ni “ver lo feo que puede llegar a ser el mundo”, en palabras del fotógrafo.
Sin embargo, creo que es imprescindible que haya gente como él que se dedique a gritarlo a los cuatro vientos. Por mucho que nos duela, cuidar de nuestro planeta es una obligación que debemos asumir. Y estoy convencida de que la fotografía es una poderosa herramienta para hacer llegar ese mensaje.

1 comentario:

Enrique Fernández dijo...

Hola wenas, decirte que habíamos pensado hacer una cena de fotoperiodismo.
Para saber más: http://www.habraquehacercenadefotoperiodismooque.blogspot.com/